EL NIÑO CANTOR

Intervención

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El niño cantor entra en bares, subtes, trenes y colectivos. Te da la mano, te roba un beso y te deja una estampita además de una canción.

La canción que el niño canta cuenta las patadas que le darán sino lleva plata a su madre, pícaro nos cuenta sus desventuras con gracia mientras cambia el ritmo a una murga alocada. Así saltando sus dolores se le cae la gorra y repentinamente l@s pasajeros descubren su mayor secreto, el es ella, es Juliana, pero "es más difícil trabajar en la calle si una es mujer, ojalá y ya hubiera nacido hombre".

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Esta intervención ha sido parte de diferentes experiencias y eventos artísticos, tanto como parte del proyecto "La intervención teatral como obra, dispositivo, acción política".

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